domingo, 21 de julio de 2013

LA HISTORIA DE LA GANADERÍA EN ÁLAMOS

Por lo intenso de esta fuente de ingresos, el escudo
municipal la presenta como brazo derecho de Álamos
 
Juan Vidal Castillo

ÁLAMOS, SONORA, JULIO 21 DE 2013.- Hace muchos miles de años, el hombre niño vivía tironeado entre el miedo y el asombro. Y cada una de esas realidades las vivía por sí mismas; desconectadas las unas de las otras.

Cuando el trueno bramaba, acurrucado en su caverna temblaba por su vida. (Toda su vida se refería a la tormenta en ese momento).

El hombre niño era recolector. Dividía a los árboles entre frutales y silvestres, según le dieran fruta o no. Distinguía a los animales entre mansos y salvajes.

Llamaba manso al animal que lo acompañaba, y salvaje al que le huía o lo atacaba.

Al darse cuenta de que la tierra tenía sus ciclos, y al aprender a convivir y a aprovechar a los animales mansos, aparecen la agricultura y la ganadería,  diremos que los primeros especímenes de ganado bovino llegaron a este municipio cuando en 1540 desbalagados se apartaron de las huestes de Francisco Vázquez de Coronado y lograron multiplicarse.

Posteriormente en 1622, los misioneros enseñaron a los aborígenes algunas de las técnicas básicas y al llegar el auge de la minería a Álamos en 1821,  dice Albert Stagg se explotó con tal intensidad que existían haciendas como la de Tapizuelas el Sr. Ignacio Almada, ordeñaba diariamente 5000 vacas para abastecer de productos lácteos la región, amén de cárnicos, pero bueno...  eso es lo que dice Albert Stagg de la ganadería de ayer.

En 1945 los rancheros de Álamos decidieron organizarse y entonces nace la ASOCIACION GANADERA LOCAL  DE ALAMOS siendo su primer presidente el SR. PEDRO SALAZAR. Su oficina estuvo frente al palacio en donde en un tiempo estuvo la fábrica japonesa de seda, posteriormente ocupo uno de los cuartos de palacio y  después el actual edificio de la calle Madero. Arrancó con 105 socios fundadores.

Los rancheros de entonces se unieron más por cuestiones sanitarias que gremiales, yendo en busca de formar un frente común para combatir las plagas y epizootias, además de impulsar mejores condiciones de comercialización, combatir el abigeato y ofrecer servicios para sus socios, además de formar una instancia de representación real frente a las autoridades de gobierno para que los esquemas de defensa individual se fueran sustituyendo por los de defensa colectiva, esto a la fecha ha permitido mantenerlos unificados y conseguir que sus problemas puedan resolverse favorablemente.
En el municipio de Álamos, la ganadería, presenta un patrón tradicionalista que se caracteriza por una explotación tipo extensivo de libre pastoreo y su productividad depende de las lluvias como factor principal.

Sin embargo, esta actividad es la que presenta mayor dinamismo respecto a los empleos generados y al valor de su producción desarrollándose en 701,195 hectáreas, de las cuales 45,000 son praderas artificiales principalmente de buffel.

Los principales problemas que enfrenta el sector son la práctica tradicionalista de los ganaderos, la falta de infraestructura como cercos y silos, la falta de mejoramiento de caminos, construcción y rehabilitación de represos y el sobrepastoreo, sobre todo en terrenos ejidales.

Debido a la falta de lluvias en la pasada temporada, el 70% de las áreas de pastoreo se encuentran en muy malas condiciones, el 10% en regular situación Sin embargo, esta actividad es la que presenta mayor dinamismo respecto a los empleos generados y al valor de su producción desarrollándose en 701,195 hectáreas, de las cuales 45,000 son praderas artificiales principalmente de buffel.

Por lo intenso de esta fuente de ingresos el escudo municipal de Álamos presenta a la ganadería como el brazo derecho de los alamenses, y debe serlo ya que durante todas las épocas del año es palpable como desde la estación cuarentenaria local salen centenares de trailers con semobientes que servirán para el abasto de diferentes partes del estado y de la unión americana.




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