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| Senadora Claudia Pavlovich |
Se crea el Instituto Nacional para la Evaluación de la Educación
como organismo autónomo, y será éste el que emita las directrices, con base en
los resultados de la evaluación del sistema educativo nacional
Ciudad de México, 23 de
agosto de 2013.- Garantizar una mejor calidad educativa para beneficio de los
niños es el objetivo primordial de la reforma a la Ley General de Educación
aprobada por el Senado de la república aseguró Claudia Pavlovich Arellano.
La senadora sonorense
indicó que estas reformas permitirán crear una nueva plataforma en el tema
educativo, lo que será fundamental para tener alumnos mejor preparados.
Entre los puntos
importantes destacó la prohibición de cuotas que condicionen los servicios
educativos, se incluyen el sistema de escuelas de tiempo completo, con jornadas
de entre seis y ocho horas, autonomía de gestión escolar y la alimentación
balanceada de los alumnos.
Además, se crea el
Instituto Nacional para la Evaluación de la Educación como organismo autónomo,
y será éste el que emita las directrices, con base en los resultados de la
evaluación del sistema educativo nacional, para contribuir a las decisiones que
ayuden a mejorar la calidad de la instrucción y su equidad.
Las evaluaciones a
docentes serán sistemáticas y permanentes con el único fin de garantizar que
los alumnos reciban una adecuada formación académica.
Pavlovich Arellano
expuso que en lo que se refiere a las cuotas voluntarias, en ningún momento
serán condicionadas al servicio educativo y serán las autoridades educativas
las que establezcan los mecanismos para su regulación, destino, aplicación,
transparencia y vigilancia.
El sistema de escuelas
de tiempo completo se aplicará de forma paulatina y conforme a la suficiencia
presupuestal y tendrán como objetivo “aprovechar mejor el tiempo disponible
para el desarrollo académico, deportivo y cultural” de los alumnos.
La senadora sonorense
puntualizó que legisladores actuaron en función de lo mejor para los niños de
México, para evitar que la única solución sean los paros y huelgas por parte de
los maestros, que si bien persiguen una finalidad legítima por mejorar las
condiciones laborales, es indispensable garantizar el derecho a la educación de
calidad.
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